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13º Festival Nits de Cinema Oriental de Vic 2016

 



 

UN DÍA Y UNA NOCHE EN LAS NITS

Hace dos años, en la edición de 2014, tuve el placer de asistir por primera vez a este pequeño festival temático que sigue luchando por hacerse un hueco en la vorágine de festivales "mayores" y caminar hacia una profesionalización que le sitúe en un mapa como referente absoluto del cine asiático de nuestro país. Su propuesta es original y festiva, ofreciendo un amplio abanico de opciones cinéfilas que navegan a través de una cuidada programación entre diversas cinematografías y géneros con el nexo común de provenir de oriente. Además, el cine se complementa con una oferta gastronómica y una muestra del folclore de los países invitados, amalgando la diversión y el descubrimiento. El año pasado no pude asistir y mis obligaciones profesionales me impidieron asistir este año a todo el festival, pero sí pude acercarme en su penúltimo día para realizar una extensa maratón que me llevó a Vic desde primera hora de la mañana hasta la finalización de una de sus habituales maratones golfas que terminó casi con las primeras luces del día siguiente. Esto fue lo que dio de sí mi día en les Nits.

Tras realizar bien temprano el trayecto en tren Terrassa-Vic, con transbordo en Barcelona (la combinación no es muy buena y el viaje se hace largo), siempre es agradable realizar un ligero paseo por la ciudad antes de fusionarse cual cyborg con una de las butacas del centro de operaciones del Festival, el Cinema Vigatà.

La primera película que vi fue 'Gamera, El Guardían del Universo' (Shusuke Kaneko, Japón, 1995) que formaba parte de la retrospectiva que este año el Festival dedicaba al Kaijû Eiga (películas de monstruos). El film mostraba la feroz lucha entre Gamera (una tortuga gigante) y Gyaos (un medio pájaro, medio murciélago), aunque el resultado no es del todo satisfactorio por su falta de humor y su poco original historia, fue una oportunidad única de asistir a un film de estas características en pantalla grande y en versión original subtitulada. Buenos efectos para un film entretenido y sin muchas pretensiones. La anécdota del día llegó al intentar salir del cine y descubrir que un enorme reventón en una tubería había convertido la acera de la fachada en un río caudaloso de agua que nos dejó incomunicados unos minutos, casi parecía una puesta en escena del Festival y que en cualquier momento se nos aparecería Gamera para socorrernos.



A primera hora de la tarde, pude ver la primera de las dos películas hindús del día, 'Baaghi (Rebel)' (Sabir Khan, India, 2016). El cine hecho en India es uno de los grandes desconocidos en nuestro país, del que tenemos una imagen algo distorsionada. Y es que no sólo de Bollywood vive su cine y en su numerosa producción anual se realizan películas espectaculares que a menudo nada tienen que envidiar a los blockbusters norteamericanos, aunando acción, romance, música y artes marciales en films que suelen rondar las 3 horas de duración (allí es habitual hacer un intermedio), mezclando comercialidad con calidad. 'Baaghi (Rebel)' nos presenta una historia clásica de triángulo amoroso donde el bien y el mal (encarnados por los dos protagonistas masculinos) se enfrentarán por el amor de una misma mujer y la demostración de quien es el más fuerte. El film, a un ritmo vertiginoso y con un montaje espectacular, combina a la perfección sus ingredientes, el romanticismo kitsch y las escenas clásicas de lucha cuerpo a cuerpo, en un conjunto entretenido y, por momentos, brillante. El film está protagonizado por una de las estrellas emergentes del país, Tiger Shroff, y una conocida actriz de Bollywood que además es un auténtico bellezón, Shraddha Kapoor.



Con poco tiempo para descansar, le tocó el turno a 'Chongqing Hot Pot' (Yang Qing, China, 2015), un intenso y efectivo thriller con espacio para el humor y el drama. Lo que empieza como una historia sencilla y agradable de un grupo de amigos sin demasiada suerte en los negocios ni en las relaciones personales, poco a poco se va ennegreciendo con una trama clásica de atracos, hasta desembocar en un festín violento y pasado de rosca donde la sangre emerge a borbotones de la pantalla, salpicando al espectador, en casi una metáfora catártica de las grises vidas de los protagonistas. Sin ser un peliculón, se deja ver con atención e interés, divirtiendo y conmoviendo a partes iguales. Buen grupo de protagonistas y escenas de acción rodadas con solvencia y tensión en un conjunto de fácil consumo, aunque sin ser especialmente original.



Después de eso, tocaba dejar por unas horas el Cinema Vigatá y trasladarse a la Bassa de los Hermanos, otro de los lugares emblemáticos del Festival, donde se celebran cenas, actuaciones y proyecciones al aire libre cada noche. Eso sí, aunque se hagan en pleno Julio, recomendable llevarse ropa de abrigo que es habitual una bajada brusca de 10 a 14 grados de temperatura a lo largo del día. La película de esa noche fue '24' (Vikram Kumar, India, 2016), una súper-producción de ciencia-ficción y acción de casi 3 horas que no escatima en presupuesto para decorados, efectos y un guión lleno de guiños humorísticos. Con un ritmo algo irregular, pero siempre entretenido, la película ofrece todos los ingredientes para encandilar a un público con ganas de puro espectáculo protagonizado por una de las estrellas del país, Suriya, también productor del film y que aquí se explaya realizando tres roles distintos, junto a él, la bella Samantha Ruth Prabhu. Para los amantes del fantástico siempre es una delicia encontrar productos nuevos bien realizados, tal vez se desaprovechan un poco las posibilidades en la trama del tema de los viajes en el tiempo y se concentra demasiado en la parte más jocosa del relato, donde el protagonista intenta ligarse a la chica utilizando su adquirido poder para "paralizar" el tiempo, pero es igualmente un producto manufacturado con elegancia y las dosis necesarias de diversión.

La película terminó cerca de la 1 de la madrugada, pero aún no era tiempo de volver a casa, es más, me resultaba imposible hacerlo puesto que no había trenes de vuelta hasta las 5:45 de la mañana, así que me dispuse a asistir a otro clásico del Festival, una de sus Noches Golfas. En esta ocasión el programa estaba conformado por la proyección de dos cortometrajes 'Am I Too Big' (Tomohiko Iwasaki, Japón, 2014) y 'Gigantic Heroine Infinite Celestia' (Kanzo Matsuura, Japón, 2016), dos singulares homenajes al Kaijû, el primero propone en tono humorístico un giro a las citas a ciegas en forma de gag y el segundo se convierte en un delirante y bizarro homenaje al cine de súper-héroes con la inclusión de una escena erótica-festiva inclasificable protagonizada por la heroína y el monstruo.



La maratón friki continuó con 'Bloody Chainsaw Girl' (Hiroki Yamaguchi, Japón, 2016), tan absurda como decepcionante, donde una colegiala armada con una sierra mecánica disfruta desmembrando a compañeros de escuela convertidos en cyborgs zombificados. La historia parecía ideal para el disfrute del cinéfilo más gamberro, pero después de un inicio prometedor con una escena gore aplaudida y vitoreada por la platea, el guión se enmaraña de tal manera que resulta complicado ver la película sin despistarse en espera de los momentos más disfrutables de la misma que coincidían cuando la joven protagonista Rio Uchida sacaba a pasear su lado más salvaje para enfrentarse a los secuaces de la otra actriz con papel estelar en el film Mari Yamachi. Escenas divertidas y salvajes se combinan con diálogos eternos y narcotizantes, solo se salvan del conjunto las dos actrices y los momentos gore.



Después de un breve intermedio que incluyó un "ressopó" gracias a los fideos de Maggi Oriental y los bombones de Cacao Sampaca, los más valientes continuamos la noche para asistir a la apología de lo cutre que es 'The Best of Tetsudon' (varios directores, Japón, 2015), una colección de más de 20 mini-cortometrajes de unos 2 minutos cada uno aproximadamente que con humor y mucha desvergüenza nos propusieron gags llenos de monstruos de cartón-piedra, efectos especiales de mercadillo, imágenes de Serie Z (y por que no se han inventado más letras en el abecedario...), en un desigual collage donde se combinaban algunos trabajos divertidos e inspirados con otros francamente sonrojantes. La proyección contó con la presencia de su productor Reji Hoshino, el cual se convirtió en el animador de la noche, invitando a vitorear y abuchear los diversos cortos que componían su film, un auténtico showman.

Y aquí terminó mi visita a las Nits 2016, un festival diferente realizado con mucho cariño y que está condenado a seguir creciendo y acaparando la atención de más público cada año. Seguro que allí estaremos para verlo.

UC Daniel Farriol.


 

PALMARÉS

Este año, al galardón Gato de la Suerte por votación popular del público se han sumado los premios del Jurado y el de la Crítica.

PREMIO DEL JURADO
(otorgado por Reji Hosino y Kyu-jun Cho)

'THE MOHICAN COMES HOME'



PREMIO DE LA CRÍTICA

'OLD STONE'



GATO DE LA SUERTE (PREMIO DEL PÚBLICO)


'IP MAN 3'



'24'



'BAAGHI'



SPOT FESTIVAL NITS DE CINEMA ORIENTAL 2016